Un sevillano que solicitó la eutanasia recurre al suicidio ante la falta de protocolos claros de la Junta de Andalucía

La ausencia de protocolos claros de la administración andaluza obligó a Antonio Buenavida a pasar de recibir una muerte digna, en paz, rodeado de los suyos, para poner fin a un sufrimiento insoportable, a hacerlo en soledad, casi clandestinamente, y de manera violenta

           

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Lloren S Lloren S no hay que dejarla morir....sino cuidarla, acompañarla, suministrarle los medicamentos y cuidados paliativos que necesite....comportarnos en suma como ese familiar, ese amigo que lo quiere de verdad y no como un verdugo deseando de quitarse un problema de encima; como una sociedad que alienta a la muerte, que le hace saber a su víctima que aquí ya no pinta nada, que supone muchos gastos y pérdida de tiempo y que casi le pide al enfermo que termine. Que digo que termine.....yo te termino¡! Yo aprovecho tu sufrimiento, tu voluntad doblegada por el dolor para convertirme en tu asesino. Legal sí, pero asesino. Qué dignidad me hablas. Dignidad es lo que te dije al principio: cuidar, acompañar, amar de verdad. Y ya sabemos que la enfermedad y el sufrimiento tienen rostros muy feos. Forma parte de la vida y....quizás estén ahí para valorar la «dignidad», no del enfermo, sino del que acompaña y de una sociedad en su conjunto. (Una sociedad hoy perversa y decadente)


Pues en Holanda los ancianitos huyen de los hospitales porque los médicos los pueden autanizar sin autorización alguna de parte de ellos o de la familia. Te ven Anciano y enfermo e interpretan que mejor que sanarte es darte una inyección para finiquitarte. Este decretazo ley de Pablo Iglesias fue impuesta porque así como Pablo lo manifestó, él aborrece a los ancianos cuando los vé por la calla como momias que se roban los recursos. Quizás por eso quería como un desesperado hacerse con la responsabilidad de los centros de ancianos durante la pandemia. Ya sabemos todos como acabó y la cola de ataúdes que hubieron para esos ancianitos al cargo de él. Esta es su ley, ojo al parche.


Luis Sánchez Corcuera lo dicho, no es tu día. Pero es normal, matar es indefendible....no hay argumentos y los que los dan legitiman la muerte de cualquiera. ¿Es cuantificable el dolor? ¿El físico, el psíquico...?¿Los que ustedes dan no legitiman igual la muerte de un joven desenamorado, que sufre, que no quiere vivir más? ¿Por qué ríen? En Holanda, hace unos años eutanasiaron delante de su familia, en el sofá de casa, a una joven violada que ya no quería vivir más. Los argumentos son los mismos. Los límites los que ustedes quieran y decidan...¿No? A ver si son ustedes los dioses.....o los que quieren sustituir a Dios. Luis, experto antropólogo, usted sabe más, es más capaz. Sabe que el ser humano tiene impresa la conciencia de Dios y que inventó e inventó.... Pero a Dios verdadero, sólo uno, no lo conocimos hasta que Él no se dió a conocer.y en la medida que lo hizo y que lo hace, aún hoy, a cada cual. Es......Historia¡! Lee.


Jesus Camacho Carretero eso no vale para la gente que pide la eutanasia, esa gente a la que los paliativos le funcionan no piden que la maten, ni una persona con un cáncer terminal, ni un anciano; hablamos de personas que llevan 20 años postradas en una cama inmóviles. No hay que ser el verdugo de nadie, hay que respetar el deseo de una persona de irse y no sufrir más. Y si no lo compartes es porque careces de empatía o porque no has tenido ningún caso cercano, o porque has escuchado dos discursos de vox y repites como un loro.


Maya Piña , los que tenemos los valores claros no estamos sujetos a ideologías ni somos de ninguna facción ni partido político. Ustedes son relativistas, no saben qué pensar, están llenos de dudas y de errores, sois manipulables; que os dicen vuestros amos con pies de barro: aquí....y aquí¡! A los dos meses os dicen: allí....y allí¡! No tenéis sustancia ni esencia, incapaces de ir contracorriente. La Verdad es sólo una, no se muta ni cambia con los tiempos ni la moda. Está ahí y hay que tender a ella. Matar no nos corresponde. Más entendible: las cosas de César a César, pero las de Dios a Dios. Qué es eso que tengamos que ejecutar (pena de muerte) ni asesinar (realidad del eufemismo eutanasiar) a nadie.


Mejor así. Así es más digno que implicar a nadie en su muerte, necesitando verdugos que actúen con la complicidad de mayorías ni destinando recursos de todos a muerte. No, así no. Los recursos a paliativos, a sanidad, a salud, a vida ¿No es una decisión muy íntima y personal? Pues eso, así también la ejecución: íntima y personal. Qué eso de implicar las instituciones, los médicos, recursos que proceden de los impuestos de todos, vinculando así tanto a «progres empáticos» (¿Serán falsos? Qué pocos quedarían si tuvieran que ser ellos los que apretaran la jeringa o suministrasen la pastillas) como detractores.
La vida es un derecho. Por tanto la muerte, que es su contrario, NO. La ley de eutanasia nos envilece a todos. Qué dignidad va a haber en matar; sólo vileza. No somos dueños de la vida. Ni siquiera el que se suicida lo es. (Si lo fuera podría controlar el dolor, el envejecimiento, la enfermedad...Pero resulta que no, que no puede. Igual nosotros resulta que no, que no podemos matar, que eso es falsa piedad porque sería una piedad que nos envilece. Nos convierte en asesinos. Es la misma raíz que sostiene los genocidios: eliminar aquellos que al genocida le parezcan «inservibles». A algunos los judíos, otros los roginha, otros los kurdos, a las madres los hijos, los discapacitados, los.....) Así mejor : Íntima y personal.




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