La explotación sexual y laboral que alimenta al porno: “Venga, que empezamos el ‘bukake”

Cuando Halyna entró en la sala donde iba a grabar, había 50 hombres semidesnudos y sin rostro. Ese no era el acuerdo por el que le habían pagado. Pidió que pararan, pero no lo hicieron. Estuvo a punto de perder el conocimiento. La persona que grababa todo aquello le amenazó con hacer daño a su familia

           

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1ºEl País continúa su aburrida campaña de moralización contra el sexo y la desnudez. Quién lo habría dicho en los 80 y 90, pero quién habría dicho entonces que El País iba a ser el perro faldero de un tal M. Rajoy, claro. Supongo que las purgas de aquel tiempo influyen en esta línea de moralización que nos hace recordar al fenecido YA. Propongo que El País dedique un artículo a la explotación de jóvenes periodistas y becarios/as, aunque no se vean tetas y pitos, es explotación..La.señora Lozano comprendo que tiene que comer y que ha descubierto un nicho que me garantiza subvenciones y premios de las terfas del PSOE, pero ya aburre con su matraca llena de falacias contra el pecado de la carne.



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