El silencio es el nuevo lujo: cómo vivir en un mundo cada vez más ruidoso nos ha hecho pagar por algo gratuito

Vidas cada vez más aceleradas, anquilosadas en pequeñas y ruidosas viviendas, unidas a los nuevos sonidos y distracciones constantes de la tecnología, nos hacen buscar lugares para guiarnos en la casi utópica idea de desconexión. Pero, una vez allí, hay quien no sabe cómo enfrentarse a la quietud

           

https://www.facebook.com/elpais/posts/10159311649811570

Yo tengo continuos ruidos en mi cabeza y encima de eso, escucho la palpitación de mi corazón. Sea cual sea donde esté, el ruido va conmigo, pero al de mi corazón no lo considero ruido, al contrario me he dado cuenta que el ritmo del corazón está íntimamente conectado a nuestros pensamientos.
Cuando medito siento que el ruido de mi cabeza se va al fondo como si se fuera lejos, cuánto más profunda mi meditación más se debilita el ruido, es para mi como una trascendencia al sonido físico y empezar a entrar en un silencio que nunca jamás me imaginé sería posible para mí.