Las universidades españolas retroceden en el ‘ranking’ de Shanghái 2023

Las universidades españolas pierden puestos en el ranking de Shanghái. De los 40 campus que el año pasado aparecían entre los 1.000 primeros (este año hay 38), 19 bajan, 2 suben y 19 se mantienen

           

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Estos rankings internacionales son puro marketing que nada tiene que ver con el nivel del contenido académico que se oferta y ofrece.

Tampoco tiene nada que ver ni con la preparación con la que un alumno sale sino con el “fondo de comercio”; es decir la percepción que se tenga de los activos tangibles (valor de estos como instalaciones, número de patentes y trabajos de investigación publicados, antiguos alumnos y profesorado de renombre que haya sido premio Nobel, etc) y sobretodo cosas intangibles (el
prestigio adquirido a través de los años por todo lo mencionado anteriormente que es lo que otorga el percibido valor de marca).

Cuando uno va a Harvard, etc y paga ese injustificado dineral (una hipoteca), lo hace por esa marca y por los contactos que pueda hacer con los hijos de las élites que le acabarán proporcionando un trabajo muy bien remunerado; no porque los programas académicos sean mejores y el profesorado mas preparado y competente que en cualquier otra universidad pública española o europea, etc, que no lo son.

La preparación y el conocimiento con el que uno sale de estas últimas es incluso superior, más completo y encima prácticamente gratis.

En definitiva, todo mentira y producto de un marketing en el que España nunca ha sobresalido teniendo unas de las universidades más antiguas del mundo


Lucía Losada Chanca exactamente. Lo que lo americanos llaman “legacy”, “cultural capital” y “hegemony”.

Las élites se perpetúan a estos niveles gracias a universidades así y debido a otras barreras y por muy del montón que sean sus hijos.

Hay miles de ejemplos: George W Bush fue a Yale siendo un estudiante del montón porque su padre donó dinero a la universidad.

Lo mismo con el hijo de Ánsar y otros tantos ineptos españoles que no estarían donde sin venir de dónde vienen.

La simplista “meritocracia” y la “cultura de esfuerzo” tan manidas por parte de la derecha occidental no existen. Es una falacia en la mayor parte de las ocasiones.

Dime de dónde y de quién vienes (con todos los recursos que ello conlleva y a los que no tienen acceso otras clases sociales) y a quien conoces y te diré cuánto vales