1ºPara los no iniciados: la admisión a trámite de una demanda sólo acredita que ésta se ha presentado ante el juzgando competente, mediante un escrito firmado por un representante procesal acreditado. No supone ningún pronunciamiento sobre el fondo de las pretensiones, ni siquiera indiciario. Esperemos que El País tenga a bien informar sobre las posteriores resoluciones, sean las que sean.
Como dato curioso: ese mismo juzgado admitió a trámite una demanda que pedía la paralización de la Ley de amnistía, absteniéndose después de conocer sobre el fondo, al entender que no existe jurisdicción para pronunciarse sobre la actividad parlamentaria, por ser materia reservada al TC, que no es parte del poder judicial. Obviamente, también hubo medios sectarios que se hicieron eco de esa admisión a trámite y no de su posterior archivo.
2ºLa desaparición de esa parte de la izquierda que empieza siendo comunista, antieuropea, anticapitalista, y antibancaria para pasar a ser socialdemócrata pijo-progre (hipster) endófoba y globalista (plutocracia en favor de homogeneizar valores, principios y políticas, derecho positivo, entorno a un ecologismo radical de corte neomalthusuanista entre veganoanimalista y de dieta insectívora, carbonófobo y vinculado al caos determinista de los modelos informáticos apocalípticos y gráficas en palo de golf del Cambio Climático), es decir, pasa a ser un niño tont0 del PSOE, no es por culpa del PP de Madrid, sino de Podemos, Más Madrid e Izquierda Unida. El PP opta también por ese modelo de socialdemocracia progre pero siendo más moderadamente socialdemócrata y por ser acomplejadamente progre, con algún canto de sirena (Ayuso) liberal-conservador, más allá de eso resulta muy difícil moverse en el espectro electoral español o hacerse un hueco en la política hasta que la socialdemocracia, progre, endófoba y globalista muera de éxito exhibiendo perfectamente la falacia buenista y naíf en la que se ha convertido.